Mi esposa Sofía y yo nos instalamos en casa de su madre mucho antes de nuestro matrimonio. Era un espacioso

Siempre creí que la familia era lo más importante. Me educaron con la idea de que la familia es el único

Llevaba más de cuatro años con Laura. Ya había comenzado a buscar un anillo para pedirle matrimonio a

Álvaro se quedó unos segundos frente a la puerta de su apartamento, con las llaves en la mano y la respiración

La suegra propuso la siguiente solución: que nos mudáramos con ella y alquiláramos nuestro apartamento.

Tengo 36 años, un hombre destrozado por los golpes del destino. Trabajo como ingeniero en una fábrica

Desde el momento en que Valeria apareció en la vida de Alejandro, su madre, Mariana, supo que algo terrible

Tengo 35 años, mi nombre no lo diré – ¿qué valor tiene un nombre cuando el alma es una cáscara vacía?

Desde que tengo memoria, nunca sentí que perteneciera realmente a mi familia. Éramos solo tres: mi madre

Durante doce años, creí que mi matrimonio era sólido. No perfecto, claro, pero seguro. Pensaba que la
