Lo pagué con creces: soy un buen médico, pero un mal padre e hijo. Cuando la vida te obliga a elegir

¿Por qué hemos cambiado tanto? Cuando era niño, la gente era más amable… Llevo tiempo haciéndome

Lucía no podía explicarlo, pero sentía que el alma de su madre había reencarnado en esa niña.

La abuela Ana estaba sentada en un banquito junto a la vieja casa en la que había vivido toda su vida.

Nosotros decidimos con mi esposo adoptar un perro del refugio. Mi marido quería comprar un perro de raza.

Javier dejó los cubos de agua en el banco de la entrada de la casa de Doña Carmen y se dispuso a marcharse

Mi hermano llevó a su esposa a la desesperación, y luego ocurrió lo irreparable. Mi hermano siempre fue

Había sucedido que Santiago había crecido bajo el cuidado de su abuela. Aunque su madre estaba viva

Quien diga lo contrario, ¡no hay felicidad sin dinero! Cuando las ilusiones chocan contra la realidad

Un nuevo miembro del equipo La nueva integrante del equipo llamó de inmediato la atención de Ana.










