Es interesante
¡Así es la vida! Perdimos veinte años preciosos, pero al fin llegó nuestro momento. Me llamo Lucía Mendoza

Veinte años de dolor y desilusión: cómo la antigua familia de mi marido convirtió mi vida en un infierno

Después de 35 años de matrimonio, mi marido se fue con otra mujer, y finalmente me di cuenta de que nunca

—¡NO PUEDO VIVIR SIN TI! —¡Me odio! —solo un pensamiento invadía la mente de Ani: ¡Me odio!

Mi marido es un rey del sofá, mientras que el vecino es todo un héroe. ¿Por qué la vida es tan injusta?

Mi esposo es el rey del sofá, mientras que el vecino es un verdadero héroe. ¿Por qué la vida es tan injusta?

—¿Entiendes, que me molesta que tengas dinero? —¿Molesta? —¡Sí! Carmen no respondió. Giró sobre sus tacones

Lo compré una pizza y un café a un hombre sin hogar, y me entregó una nota que lo cambió todo.

La nuera escondió una grabadora en casa de su suegra Javier y Lucía llevaban dos años casados.

Me llamo Pedro Hernández y vivo en Arévalo, donde las calles modestas de Castilla y León se cobijan bajo
