Es interesante
Lo que me preocupa es que, siendo tan joven, ya quiera comprometerse con hijos ajenos…

Lorenzo siempre admiró a su abuelo Felipe. Mi padre, mi madre y yo vivíamos con mi abuelo materno en

«El amor no se compra con dinero». Un agricultor andaluz tenía unos cachorros que decidió vender.

Un supermercado en Madrid al caer la noche. Isabel, sentada en la caja, lloraba en silencio por el cansancio

Un anochecer tardío en el supermercado de la ciudad. María se sentaba en la caja, llorando silenciosamente

Lo mismo me dijo el vestido. ¿Insinúas que fui yo quien lo tiré allí? – exclamó Paloma al abrir

Nací ya con cuatro años… No recuerdo nada. No quiero recordar nada. Quisiera olvidar lo que a veces

Nací cuando tenía cuatro años… No recuerdo nada. No quiero recordar nada. Quiero olvidar lo que a veces

Lamento decirlo, pero por mucho que lo intente, no puedo llamar mamá a mi suegra. Cuando me casé, era

– Eres más rico que Laura, por eso los regalos deben ser acordes, – murmuró la suegra. –
