Es interesante
—Carmen Valdés, se lo suplico. ¡No me despida! Tengo dos hijos, una hipoteca. —Inés Álvarez estaba frente

Isidora miraba por el ventanal el vaivén callejero. Los autobuses de la EMT rechinaban idénticos al frenar

—Señora Mendoza, se lo ruego, ¡no me despida! Tengo dos hijos ¡y una hipoteca que pagar! —Carmen García

Hoy abro estas páginas con manos aún temblorosas. Recordar ese día me estremece… “¡Inés, ¿qué demonios haces?

Ya anochecía tras el ventanal, y mamá aún no regresaba. Julia, haciendo girar las ruedas de su silla

Oye, qué te voy a contar algo que me pasó el otro día en el metro. Era una tarde cualquiera, después

Esos ya no son para mí… “Antonio, ¡pasa!” ordenó el jefe por teléfono directo. Antonio sabía que

Diez años callada —¡Basta de silencio! —gritó Elena, dando un manotazo a la mesa—. ¡Diez años aguantando

El derecho a equivocarse. Leticia descubre por casualidad que su padre tiene una amante el día que falta

Oye, macho, te cuento esta historia que me tiene con el corazón encogío. Jorge se giraba de repente al










