Es interesante
Nací ya con cuatro años… No recuerdo nada. No quiero recordar nada. Quisiera olvidar lo que a veces

Nací cuando tenía cuatro años… No recuerdo nada. No quiero recordar nada. Quiero olvidar lo que a veces

Lamento decirlo, pero por mucho que lo intente, no puedo llamar mamá a mi suegra. Cuando me casé, era

– Eres más rico que Laura, por eso los regalos deben ser acordes, – murmuró la suegra. –

¡Potencia tu conocimiento! ¿SABÍAS QUE?❓ Las aves no orinan. Los caballos y las vacas duermen de pie.

¡Potencia tu conocimiento! ¿SABÍAS QUE?❓ Las aves no orinan. Los caballos y las vacas duermen de pie.

-Lo siento, ¿adónde van? Justo habíamos venido de visita – dijo la cuñada con las manos en la cintura.

El sábado, en el mercado, me encontré con mi antigua suegra. Estaba muy cambiada, se había envejecido.

No es mi familia — Mamá, ¿qué carta es esa que escondes? — Es del pueblo, de tu abuelo — respondió ella

Mi esposa, después de 10 años de matrimonio, me dejó por un hombre rico, dejándome con nuestros dos hijos pequeños.










