Al subir al avión, noto que nuestros asientos están ocupados.
Mi esposa, María González, y yo teníamos previsto visitar a familiares en Sevilla. Compramos dos billetes de avión, dejando libre un asiento junto a la ventanilla.
Sé que el avión que vamos a tomar dispone de tres filas de asientos, así que elegimos los asientos de manera que quedemos lado a lado y con una ventanilla disponible.
Al entrar al avión, descubro que alguien más está sentado en nuestro sitio. Reviso mi billete y todo parece estar en orden. En mi asiento está sentada una mujer, y en el de María está su hijo de cinco años. La pasajera actúa con normalidad, así que pienso que habrá confundido los números de los asientos.
Están en nuestros asientos le digo.
La mujer no responde. Cuando María vuelve a insistir, la mujer se gira y contesta:
Mi hijo quería sentarse junto a la ventanilla. El que llegó antes se lleva los mejores asientos. No vamos a cambiar. Si quieren, tomen los asientos de la fila del medio, están vacíos.
Lo siento, pero yo adquirí esos asientos deliberadamente. Por favor, liberen los suyos y no armemos un escándalo.
¿No ve que el niño está emocionado? Si lo desplazo ahora, se enfadará. ¿Acaso no tiene hijos? Usted es un adulto.
María y yo decidimos no discutir y llamamos al camarero. Sólo después de que él interviene la mujer cede su puesto.
Si realmente necesitaba una ventanilla para su hijo, ¿por qué no reservó con antelación? ¡Es puro egoísmo!
Afortunadamente, el camarero resuelve el asunto rápidamente, porque la disputa podría alargarse mucho. Los demás pasajeros nos respaldan, ya que no provocamos un escándalo, sino que tratamos de solucionar el conflicto de forma pacífica.
Lo único que no entiendo es por qué algunos viajeros con niños se creen especiales. Nosotros también tenemos hijos, pero no permitimos que se nos arrebaten los asientos ni que se nos empujen sin colas.
Me alegra que el resto del viaje transcurra sin incidentes y espero que la mujer aprenda a comprar su billete con asiento asignado y a no poner en aprietos a los demás pasajeros.







