Author: Carmen Fernández
Querido diario, ¿Crees que voy a seguir corriendo tras ti? le dije a Cayetana, mientras ella me escupía

¿Otra vez con ella?Zoraida, con la mirada ennegrecida por la decepción, enfrentó a su marido.

Mi nuera me pidió distancia, pero un día fue ella quien llamó pidiendo ayuda. Tras la boda de mi hijo

Hace ya muchos años, recuerdo cómo mi sobrina, Enriqueta, había demandado un cochecito para su bebé y

¡Mamá, no molestes a papá cada noche! Mamá, tengo que hablar contigo como mujer con mujer dijo la niña

Querido diario, Hace unas semanas, mi amiga Lucía, recién divorciada, llamó desesperada y solo me soltó

Carlos decidió mandar a nuestro hijo al pueblo de la madre, contra mi voluntad ¿Estás bromeando?

La primera vez que Lucía vio a Andrés fue en la oficina del ayuntamiento de Madrid. Él había llegado

Mi suegra es una persona estupenda, hasta que se niega a pagar los extraescolares de su nieto.

«¡Me han robado la ropa, vaquero! ¡Sálveme!», imploró la mujer gitana al borde del lago. El triciclo










