Antes del divorcio, Lina se ocupaba sola de su hijo, pero luego encontró una niñera: la madre de su exmarido. Al principio, ella misma cuidaba al niño, pero después empezó a buscar ayuda. La encontró en su suegra. Primero le preguntó si conocía a alguien que pudiera ayudar, pero su suegra se ofreció, claro, a cambio de dinero. El sueldo de Lina no es muy alto, tiene que ahorrar.
En el trabajo tengo una compañera que no lo tiene fácil. No se cuida mucho, ni siquiera va a la peluquería. Siempre me pregunto en qué se le va el sueldo. Vive con sus padres, no tiene hipoteca como otros, y la que cuida a su hijo es su exsuegra, además de que recibe una pensión alimenticia.
Resulta que Lina tiene que pagar a sus padres por la habitación y también a su suegra por cuidar al niño. ¿Cómo puede ser así?
Hace medio año, cuando Lina empezó a trabajar con nosotros, nos hicimos amigas. Pronto descubrimos que teníamos mucho en común: aficiones parecidas, hijos de la misma edad.
Desde el primer día, me contó que se había divorciado y se había mudado con sus padres. Sus padres son gente de éxito, ambos tienen buenos trabajos y más de cincuenta años. Tienen una casa en las afueras y se van de vacaciones al extranjero cada año. Cuando su hija volvió, le dieron una habitación donde vivir.
Pensé que quizá podía vivir allí gratis, pero no, desde el principio le cobraron. Aunque Lina está contenta de vivir con ellos y no con extraños, es mejor para su hijo.
También le dieron un estante en la nevera solo para ella, no usa las cosas de sus padres, y a veces le da alguna fruta al niño.
No entiendo cómo pueden tratarla así, sobre todo porque Lina, después de dejar a su marido, no tenía nada, y los primeros meses estuvo endeudada con ellos.
Antes del divorcio, ella misma cuidaba al niño, pero luego buscó una niñera. Y la encontró: su suegra. Al principio le preguntó si conocía a alguien, pero ella misma se ofreció, por supuesto, cobrando. A Lina le pareció bien porque su suegra conoce al niño, sabe lo que le gusta, lo que no, qué puede y qué no debe hacer. Es responsable. Así que, cuando lo necesita, la suegra se ocupa del pequeño.
Todo estaría bien, pero Lina no tiene dinero, no le llega para vivir y ni hablar de lujos.
No puedo entender cómo unos padres pueden tratar así a su propia hija







