Hoy cumplo sesenta y nueve años. Vivo en un piso pequeño en las afueras de Sevilla, donde la ansiedad

**Gafas Moradas** **EL LOBO.** Un perro flaco y sucio lanzó un gemido. La piedra le había golpeado la pata.

La maternidad es un regalo inmenso, pero también una dura prueba. Cuando nos convertimos en madres, lo

Me llamo Nicolás. Tengo 72 años. Vivo solo en una casita vieja en las afueras de un pueblo pequeño, donde

«Llevaban juntos 41 años y aún así se divorciaron… Le pregunté: ¿por qué?» A veces parece que si dos

Tengo cincuenta años, mi marido cincuenta y cinco. Toda la vida hemos vivido con modestia, pero unidos

El viejo se iba… La anciana lo sabía, lo sentía en cada partícula de su alma, fundida a la del hombre

Tengo 47 años, pero ya no siento alegría por la vida… Las mujeres, en realidad, no trabajan un turno, sino dos.

**Todo por mi hijo, y al final solo quedan culpa y soledad** Tengo sesenta y nueve años. Vivo en un modesto

A veces la vida nos pone ante una decisión que puede romper una familia en dos. Estoy en esa encrucijada.
