Elena acababa de fregar los platos después del desayuno cuando sonó el teléfono. Era su suegra, Raquel.

Vamos a celebrar el año nuevo en vuestra casa de campo dije, intentando que mi cuñada María no pareciese

Él la empujó con fuerza fuera del umbral y tronó la puerta. Luz, todavía girando por la inercia, tropezó

Querido diario, hoy, mientras la lluvia golpeaba el tejado de la casona de San Juan, Ana se recostó en

El taxi se detuvo frente a las entradas del cementerio. Un joven bajó del vehículo y se acercó al puesto

¿Cuándo piensas irte, Marina? La madre estaba en la puerta de la cocina, apoyada en el marco.

¡Irene, ¿qué te pasa? ¡Tienes cuarenta grados! No me sueltes, Sofía, tengo que llegar al trabajo, el

¡No puedes vivir así, Celia! Tienes treinta y te comportas como una ancianita decía su madre, sentándose

Si no fuera por la curiosidad innata que le heredó su padre, el anticuário don Antonio, Alejandro habría

¿Cuándo piensas irte, Marina? La madre estaba en la puerta de la cocina, apoyada en el marco.










