Es interesante
00
Algún día verás que he envejecido.
Querido diario, Hoy he notado que mis manos tiemblan al abotonar la chaqueta y, al almorzar, casi dejo
MagistrUm
La joven elige el amor, nosotros pagamos las consecuencias
Verónica deambulaba nerviosa por su pequeño piso en Lyon, con el móvil apretado en la mano, mientras
MagistrUm
Es interesante
02
Cuando tenía trece años, aprendí a ocultar el hambre — y la vergüenza.
Cuando tenía trece años descubrí cómo disimular el hambre y la vergüenza. Vivíamos tan justo que a menudo
MagistrUm
Es interesante
036
Se divorció en la vejez buscando compañía, pero una respuesta inesperada le cambió la vida
Divorciarme a los sesenta y ocho años no fue un acto de romanticismo ni una crisis de mediana edad.
MagistrUm
Es interesante
013
Cuando tenía trece años, aprendí a ocultar el hambre — y la vergüenza.
Cuando tenía trece años descubrí cómo disimular el hambre y la vergüenza. Vivíamos tan justo que a menudo
MagistrUm
Es interesante
011
Acabo de pensar que quizás tú y yo somos una familia un poco fuera de lo común
Hace mucho tiempo, en un rincón de Madrid, me vino a la mente una idea: “Tal vez nosotros, querido
MagistrUm
Es interesante
017
Cuando mi abuela se enteró de que estaba enferma, lo tomó con una tranquilidad inusual para la mayoría de la gente. Se sentó en la cocina, se sirvió un té, miró por la ventana y dijo:
Cuando mi abuela, Azucena, supo que estaba enferma, la recibió con una serenidad que pocos poseen.
MagistrUm
Es interesante
017
¡No pasa nada, Slavko! ¡No te pongas triste! Al menos recibiste el Año Nuevo con estilo y alegría.
¡Nada, Salvador! ¡No te pongas triste! Al menos el Año Nuevo lo celebraste a lo grande. Ahí estaba su
MagistrUm
Es interesante
02
Tengo 55 años y finalmente vivo para mí. Sin remordimientos, sin miedo a ser “distinta” o a decepcionar a alguien. En mi espacio reina la armonía: tranquila, suave, casi silenciosa. No hay emociones ajenas que antes me agotaban por completo. Nadie me dice cómo vivir, qué vestir o de qué soñar. Vuelvo a ser dueña de mí misma.
¡Oye, Cata! ¿Sabes qué? Tengo 55 años y, por fin, vivo para mí. Sin culpas, sin miedo a que me vean diferente
MagistrUm
Es interesante
022
– Papá, ¡no te vayas! Cariño, ¡no nos abandones! Papá, no me compres nada más, ni a Leo tampoco. ¡Solo vive con nosotros! No quiero coches ni caramelos. ¡No necesitamos regalos! ¡Solo queremos que estés aquí! – gritaba Gael, de seis años, abrazado a la pierna de su padre
¡Papá, no te vayas! ¡Querido, no nos abandones! Papá, no me compres nada más, ni a Leo tampoco.
MagistrUm